Hijos de adictos: las consecuencias

Los adictos no son los únicos perjudicados por su abuso de sustancias. También puede dañar a todos los que los rodean, incluidas sus familias y sus hijos.

Más de ocho millones de niños en los Estados Unidos viven con un adicto, y esa experiencia puede perseguirlos de por vida. Los hijos de adictos pueden sufrir múltiples trastornos, como ansiedad, depresión y TEPT. Peor aún, tienen el doble de probabilidades de convertirse en adictos.

Afortunadamente, estos niños pueden ser ayudados. Los psicólogos han identificado varias estrategias de afrontamiento que un niño con un padre adicto puede usar para lidiar con el estrés que proviene de vivir con un adicto. Muchas de estas estrategias son fáciles de aprender y pueden ser utilizadas por los niños por sí mismos en la vida cotidiana.

Si usted o un ser querido sufre una adicción, busque ayuda lo antes posible. Un centro de tratamiento puede llevar al adicto a un programa de tratamiento de adicción a las drogas que ofrece los métodos más avanzados, incluidos programas ambulatorios. Para obtener más información sobre los problemas que enfrentan los hijos de adictos y cómo ayudarlos a afrontarlos, contáctenos